rutina

Suena el teléfono, oh... eres tú, por un segundo me quedo mirando tu número, pocas veces puedo hacerlo, durante tres segundos me siento la persona más feliz del mundo porque es tu numero, eres tú, y quieres oír mi voz.

Descuelgo y eres tú, esa persona en la que pienso durante todo el día.
Minutos despúes empieza la discusión, cuelgo, llamas, cuelgas, llamo.
Luego el adios de verdad y durante cinco minutos me siento la persona mas miserable del mundo, siento que me falta oxigeno y me vienen todos los recuerdos a la vez, agarrandome con fuerza y gritando NUNCA MÁS.
Lloro, grito y le doy golpes a todo lo que encuentro por mi paso, te mataría, en esos momento en los que cuelgas el teléfono porque te tienes que ir, te pegaria y lo haria un todas mis fuerzas.

Y cuando ya han pasado exactamente 10 minutos vuelve la calma; poco a poco llega y con sigo el autoconvencimiento de que todo va bien.

Más tarde me da por escribir y finalmente todo vuelve a la normalidad, hasta que tu a los 3 días vuelves a llamar y entonces otra vez lo mismo.

duele, y cada vez que lloro y grito lo hago con mas fuerza y la calma tarda más y más en venir.
No puedo más.