jueves, 22 de septiembre de 2011



Caerás, aprenderás y te levantaras. No será una vez, ni dos, pero será, y no fácil. Llorarás, gritaras, correrás, sentirás que te falta el aire, notaras que mas de una noche te cuesta dormir pero después de todo siempre siempre pasa el tiempo y eso es así. Imposible de parar. Tanto para lo bueno como para lo malo y créeme cuando te digo que un dia miraras atrás sentada desde un presente que ahora vemos futuro y te reirás a carcajadas de eso que ahora mismo te hace llorar. Y cuando vuelvas a estar feliz y te des cuenta de que la vida te sonríe encontrarás otra piedra que saltar y lo volverás a hacer y así sucesivamente pasarán tus días. Pero ¿entiendes? Eres indispensable, en el sentido de que cada persona en el camino de tropezar con piedras o no, va complementado a otras que pueden estar tan mal o incluso peor que tu, asique por el momento ya tienes dos motivos para pensar que vale la pena dejar que pase el tiempo; primero porque volverás a sentir la felicidad bajo tus pies y esa sensación ambas sabemos que es imposible de definir y segundo porque necesito que sigas estando ahí como siempre formando ese puzle de personas, mis personas, indispensables.

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