La lúz cálida, ténue, una tarde de otoño fría, como últimamente.
En mi cama, hacia arriba, descansa. Serenidad, tranquilidad, respiración. Tus ojos singulares muestran esa paz y sensación de plenitud.
Completo, complemento, complenetados, Tu mirada asegura confort, miras con timidez a una historia imposible que se encuentra atrapada entre la verdad y la insensatez.
Cada vez más cerca y con más ganas de dejarse llevar, dejarse elevar fuera de la superficie de la tierra. Ahora el tiempo lucha en mi contra, me ata al pasado y al mismo tiempo me impulsa al futuro. Pero no es tan facil, no se trara de un futuro como otro cualquiera, se trata de un futuro indefinido, indeterminado en el que un sólo paso en falso puede cambiar irremediablemente el transcurso de las cosas.
Y entonces este segundo queda conjelado pero no en cualquier lugar, queda en mi memoria como una imagen que me da felicidad, pero eso es todo.
Porque la via facil... habria sido dejarse llevar "allí y entonces". Acercarme y darte un beso, pero "distinto" y en cambio lo difícil fue decir... "me voy a levantar" aunque no tanto como tus palabras "porque quieres" Y en realidad sabes que querer no es deber.
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